Según estudio del INE España perderá 552.245 habitantes en los próximos tres lustros y en 2031 uno de cada cuatro españoles tendrá más de 65 años.
Seremos cada vez más y habrá cada vez más ancianos. Tan sólo la Comunidad de Madrid, Canarias, Baleares, Murcia y Cataluña serán las comunidades autónomas que ganarían población de aquí a 2031.
Una consecuencia directa de esto será que la tasa de dependencia subirá del 53% actual al 92% en 2051. Si tenemos en cuenta que la tasa de dependencia nos indica de cada 100 personas en edad de trabajar cuántas son dependientes, es decir, menores de 16 años y mayores de 65, esto quiere decir que el que trabaje tendrá que hacerlo de tal forma que pueda mantenerse a sí mismo y a una persona dependiente (menores de 16 años y mayores de 65).
En palabras de García Montalvo «Si la Seguridad Social no consigue suficientes recursos no nos quedará más solución que aumentar las aportaciones«.
Por otra parte según Antonio Abellán (CSIC) «la vejez va a ser un poco diferente, mejor que la de ahora. Estas personas van a estar mejor de salud y, como se van a morir menos los hombres, no habrá tantas viudas. Habrá más parejas y eso implicará que se mantendrán mutuamente. El panorama actual de atención a dependientes va a cambiar.»
Fuente: El Mundo. Ver artículo
